sábado, 10 de octubre de 2009

I N V EN C I B L E

Las olas de la playa,
su sonido singular,
me alejan del camino,
que despacio iba a caminar.
Junto a ti,
junto a tu cuerpo,
junto a tu aroma
y a tu sonrisa.

Todo esto , tan inquietante,
y a la vez tranquilizante,
me lleva a otro mundo,
sin necesidad de viajar.
Me hace cambiar de humor,
de pensamiento,
A tu lado me siento libre,
a tu lado me siento real.

Ya atrás quedan los dias,
que decidí cambiar,
de una vida atolondrada,
al placer de disfrutar.

Allá lejos muy atrás,
casi al lado del horizonte,
veo un mar de montañas,
veo un río de circumstancias.

Pero ante todas ellas,
tú,
las anulas todas,
las reemplazas,
las abduces,
y me haces feliz.

Tú eres de otro mundo,
extraterrestre,
consumes mi felicidad,
agotas mis pensamientos,
a tu lado me siento libre,
a tu lado...

Soy invencible.


lunes, 16 de marzo de 2009

Brezal de Los Sueños




Brezal de Los Sueños es un lugar,
donde nada podrá parar,
la fantasia de este nuevo mundo,
que todo nos lo dará.

Me gusta este sitio,
me inspiro al caminar,
mis pasos son testigos,
de mi mundo estelar.

Las estrellas me inspiran,
me inspira una mirada,
de unos ojos verdes,
que brillan sin parar.

Sin parar brillan esos ojos,
sin dejar de brillar,
una mirada verde, gris marrón, brillante,
y sobretodo: fugaz.

Esta mirada que describo,
nunca se va a acabar,
ella da vida a las estrellas,
al monte y a la playa.

El Manantial de estos ojos verdes,
produce agua de vez en cuando,
un líquido brillante
y muy sentimental.

Hay veces que El Manantial,
sufre una gran sequera,
pues la alegria y el amor,
son los que la crean.

Ojos verdes misioneros,
de un mundo singular,
tan brillante como la Luna,
como el Sol al madrugar.

Un mundo donde nada,
hace no brillar,
todos los sentimientos,
que reflejo en este lugar.

Un mundo más allá,
de fustraciones y enfados.
En él lo más importante,
son sus ganas de soñar.

Y sueñas, y sueñas,
y vuelves a soñar,
este es el mundo de Los Sueños,
que nunca morirá.

Nada morirá nunca,
ni Los Sueños, ni los ojos,
ni la Ilusión de Libertad,
son las ganas las que cuentan,
son las ganas de soñar.

No he hablado de los habitantes,
ni del Rey ni de la Reina,
allí no hay pobladores,
habita la Libertad.

Un mundo para todos,
un mundo singular,
tan grande como la tierra,
tan brillante como la Luna.

Muchas ganas de soñar,
y muchas más de inventar,
esta obra que os cuento,
es una obra de verdad.

Un mundo para todos,
un mundo singular,
tan grande como la Tierra,
tan brillante como la Luna.

Muchas ganas de soñar,
y muchas más de inventar,
esta obra que os cuento,
la dedico al verbo soñar.
Cornelius G.