No necesitaba motivos para decir que últimamente, la confianza era nuestro punto débil, que nos molestabamos. Tal vez, nunca deberiamos haber sido tan amigos, porque este verano fuiste la persona a la que más he odiado en mi vida.
Errores, bromas, mentiras... acabaron con nosotros. Con lo que un dia fue, y lo que nunca volvió.
Conversaciones, estupidez, sonrisas... nos traicionaron. Pero ahora somos tu y yo, nuestra amistad lejana, y miles de recuerdos enfundados, en la pelicula de nuestro ayer.

No hay comentarios:
Publicar un comentario